por Luis E. Sabini Fernández –
El asesinato de una periodista conocida en su ámbito laboral y político reveló implicancias políticas e ideológicas y desnudó, una vez más, un modus operandi en este caso de los poderes que procuran regir destinos de otros.
Ana Jerozolimski, que se presenta como periodista, pero que bien podría ser, por su afinidad e identidad, funcionaria diplomática israelí, publicitó el asesinato de la periodista palestina Shirin Abu Aqleh como probablemente cometido por palestinos.
Cito: “El Ministerio de Salud de la Administración Nacional Palestina no se basó en ningún reporte médico, pero decidió que la había matado Israel. Y de allí empezó el coro ya conocido y nada sorprendente de acusación explícita a Israel, a ‘la ocupación’, a ‘los sionistas’ y demás.”
″Puede no sorprender cuando se trata de informaciones de fuentes árabes en general y palestinas en particular, pero es especialmente lamentable que lo determinen también agencias de prensa internacionales que tal como sucede muy a menudo, simplemente repiten las versiones palestinas. Lo vimos claramente en la cuenta de Twitter de AFP.”
″Ahora, a los hechos.
″En un video difundido por Avichai Adraee (se pronuncia Avijái Adraí), portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel en árabe, se ve claramente que un palestino armado dispara en forma indiscriminada hacia un callejón en el campamento de refugiados Jenin. «De acuerdo a estimaciones preliminares, eso resultó en la muerte de la periodista Shirin Abu Aqleh», escribe el portavoz israelí. Y explica. ‘Se vanaglorian de haber matado a un soldado, pero nosotros lo negamos’. Ningún efectivo israelí fue muerto en el operativo en cuestión, destinado a detener sospechosos de estar planeando atentados terroristas en Israel.″
″En el video se oye a un palestino gritando ¡Le pegamos a un soldado! ¡Está tirado en el suelo! Pero el hecho es que no había ningún soldado, ya que el ejército confirmó que ninguno de sus hombres había sido alcanzado por las balas. ¿Entonces? Al parecer esa podría ser la periodista de Al Jazira.
″Luego, en otro video publicado muy poco después, se ve a palestinos acercándose a alguien que yace en el suelo. Uno grita, hablando en masculino, ‘levántenlo’, pensando al parecer que era el soldado [israelí]. Pero luego corrigen al ver que es una mujer.”
″El portavoz militar en árabe reveló que Israel ofreció llevar a cabo una investigación conjunta y una autopsia pero los palestinos se han negado, y pregunta retóricamente por qué: ‘Quizás se niegan para intentar esconder la verdad’, resumió.”
″A esto, Adraee agrega ‘nuestro profundo pesar por la muerte de la periodista Shirin Abu Aqleh, con quien hemos estado trabajando a lo largo de los años’, señalando que ‘damos mucha importancia a la libertad de prensa y trabajamos para respetarla y protegerla’.”
Escrito por AJ el 11 de junio de 2022.
Días después, las conclusiones de la comisión designada por la ONU para investigar esa muerte dictaminó:
“Los disparos que mataron a Abu Akleh e hirieron a su colega Ali Sammoudi provinieron de las fuerzas de seguridad israelíes y no de disparos indiscriminados de palestinos armados”, ésta es la conclusión de la investigación realizada por Naciones Unidas sobre la muerte de la periodista Shirin Abu Aqleh (cit. p. Mikel Ayestarán, corresponsal de El Correo, Bilbao, 24 junio 2022).
Dice Ayestarán, más adelante: “Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, aseguró en el transcurso de la presentación del informe que en la zona «no había actividad de grupos armados palestinos» y que «se dispararon varias balas hacia los periodistas desde […] las fuerzas de seguridad israelíes».”
La investigación del organismo internacional recoge que los soldados siguieron disparando contra un hombre desarmado que acudió a socorrer a Abu Aqleh. Una situación que se puede ver en las imágenes grabadas por los reporteros. En opinión de la comisión de la ONU es «muy preocupante que las autoridades israelíes no hayan llevado a cabo una investigación criminal».
El régimen israelí no se ha inmutado. No se ha abierto sumario. No ha encarado ubicar al responsable; más bien todo lo contrario. Prosigue Ayestarán:
“Israel apuesta por la ambigüedad y mantiene como versión oficial que «Abu Aqleh no recibió un disparo intencional de un soldado» y que «no es posible determinar si fue asesinada por un miliciano palestino o por un soldado».”
Ya con los hechos aclarados por la investigación de la comisión internacional –cuyo dictamen ha coincidido con los de dos comisiones periodísticas enviadas por The New York Times y Washington Post– entiendo que la “interpretación” que transcribimos inicialmente de AJ, merece un examen por sí misma.
Recordemos la fábula acerca de todos los lugares donde se “veía” a Sergio Maldonado desaparecido en Argentina hace cinco años. Cruzando una carretera, manejando una moto… llegaron a visualizar un poblado donde todos se parecían a Sergio o más bien, todos eran Sergio, quien a esa altura ya estaba muerto, matado, a recaudo de la Gendarmería argentina, que estaría evaluando cómo podrían “socializar” esa muerte.
Releamos la versión israelí:
- “El Ministerio de Salud [palestino] no se basó en ningún reporte médico, pero decidió que la había matado Israel” Tras semejante afirmación, la queja autovictimizante: “agencias de prensa internacionales, como sucede muy a menudo, simplemente repiten las versiones palestinas. Lo vimos claramente en la cuenta de Twitter de AFP.” ¡El mundo mediático apoya a los palestinos!: ¡eso sí que es un notición mundial!
- “Ahora, a los hechos”, apostrofa AJ, con lo cual sin querer nos dice que su fraseo anterior sería “verso”, y sigue rauda: “En un video difundido por [el] portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel en árabe, se ve claramente que un palestino armado dispara en forma indiscriminada […]”
- «De acuerdo a estimaciones preliminares, eso resultó en la muerte de la periodista Shirin Abu Aqleh», escribe el portavoz israelí. Y explica: «Se vanaglorian de haber matado a un soldado, pero ningún efectivo israelí fue muerto.”
- «Se oye a un palestino gritando» ¡Le pegamos a un soldado! […]. Pero el hecho es que […] ejército confirmó que ninguno de sus hombres había sido alcanzado por las balas. […] podría ser la periodista de Al Jazira.
- «[…] en otro video publicado […], se ve a palestinos acercándose a alguien que yace en el suelo. Uno grita, hablando en masculino, «levántenlo”. Pero luego corrigen al ver que es una mujer.”
Observemos la retahíla de hechos: todos confluyendo al asesinato de Shirin Abu Aqleh por descuido y desorden violento de palestinos. Que ni saben a quienes matan. La figura del palestino sigue siendo la que legitima una colonización civilizadora. Los palestinos son descritos como tozudos e irracionales.
- El portavoz militar, que habla en árabe nos revela que “Israel ofreció llevar a cabo una investigación conjunta y una autopsia, pero los palestinos se han negado y pregunta retóricamente por qué. Aquí, la deducción sherlokholmiana: «Quizás se niegan para intentar esconder la verdad». Bingo.
Y luego, faltaba más, la mostración de más buenos sentimientos; el toque emotivo, de despedida, lacrimógeno:
- ‘nuestro profundo pesar por la muerte de la periodista Shirin Abu Aqleh, con quien hemos estado trabajando a lo largo de los años’, […].
- Y el remate de la defensa irrestricta… ‘damos mucha importancia a la libertad de prensa (que no es la de expresión) y, remata con el humilde autobombo: ‘trabajamos para respetarla y protegerla’.
Como corolario de estos simulacros informativos que hemos procurado desgranar, nos llama finalmente la atención la impunidad con que alguien llegue a firmar los párrafos transcritos y no tenga necesidad de hacer la menor rectificación, pedido de disculpas, a la luz de lo ya dilucidado./